La temporada de verano presenta desafíos únicos para los pintores, especialmente en trabajos exteriores, debido al impacto del calor sobre las superficies pintadas. Aquí abordaremos los problemas más comunes que pueden surgir debido a las altas temperaturas, y compartimos algunos consejos prácticos para mejorar la durabilidad y calidad de tus proyectos de pintura.
Retos de Pintar en Verano
Bases Profundas y Colores Oscuros:
Los colores oscuros para exteriores, como los tonos de base profunda, absorben más calor en comparación con los tonos claros, lo cual puede generar burbujas o ampollas en la pintura. Esto se debe a que estas bases contienen más pigmento y, por lo tanto, una mayor capacidad de absorción de luz y calor. La clave está en controlar la temperatura de la superficie para evitar deformaciones y fallas en la pintura.
Valor de Reflectancia de Luz (LRV):
El LRV es una medida de cuánta luz y calor absorbe un color. Por ejemplo, el negro tiene un LRV de 0, absorbiendo toda la luz y calor, mientras que los tonos claros reflejan más, manteniendo la superficie más fresca. Elegir colores con un LRV adecuado y pintar en sombra ayuda a reducir el riesgo de burbujeo.
Pintar en Sombra:
La sombra no solo es más cómoda para trabajar, sino que también protege la pintura al evitar el calor directo. Aunque la temperatura ambiente sea de 27 °C (80 °F), las superficies expuestas al sol pueden alcanzar temperaturas mucho más altas, perjudicando el acabado de la pintura.
Cómo Manejar Ampollas y Burbujas
A pesar de las precauciones, pueden aparecer burbujas en la pintura. La mejor opción es esperar a que la superficie se enfríe; muchas veces, las burbujas disminuyen cuando la superficie recupera su temperatura normal. Si aún persisten, utiliza una espátula para raspar suavemente y lija la zona antes de retocar en condiciones frescas.
Herramientas Adicionales para Control de Temperatura:
Un termómetro de infrarrojos es útil para medir la temperatura exacta de la superficie antes de aplicar pintura. También es recomendable utilizar un medidor de humedad, especialmente en climas con alta humedad, para garantizar condiciones óptimas.
Cuida de ti También
Pintar en exteriores implica largas jornadas bajo el sol. Usa protector solar, equipo adecuado y asegúrate de mantener hidratación para protegerte a ti mismo al igual que a tu equipo.
El calor puede afectar gravemente la durabilidad de un trabajo de pintura en exteriores, especialmente con colores oscuros. Seguir estas prácticas garantiza no solo la calidad del trabajo, sino también la satisfacción del cliente y la eficiencia en los procesos.