Un sector construido por hombres y mujeres

En esta entrega quisimos hacer un sondeo con maestros y maestras, quienes de manera anónima nos dieron sus testimonios de acciones y comentarios que han vivido, y en otros casos, evidenciado del maltrato hacia las mujeres que trabajan en obras de construcción. Este es un problema de violencia de género que comúnmente suele presentarse en el sector, pero que infortunadamente carece de atención.

En este punto de la historia aún son miles de mujeres en el mundo que se encuentran en un círculo vicioso de patrones dominantes que limitan su forma de participar y decidir en los diferentes espacios de la cotidianidad.

Al 2021 según las cifras dadas a conocer por Camacol Bogotá, la Secretaría de la Mujer y la Secretaría de Hábitat, de 757.000 personas que emplea la construcción de vivienda, tan solo 54.000 son mujeres.

Como estos, hay muchos más datos que aunque otorgan un poco de esperanza al ser comparados con las de años anteriores, aún la equidad de género en el sector tiene mucho camino por trazar.

No obstante, en esta entrega les quiero hacer un importante llamado a la acción a los hombres de este sector: súmense a construir espacios más agradables y con mejores garantías para las mujeres colegas, ustedes son fundamentales en este proceso.

¿De qué manero lo pueden hacer?

Para dar respuesta a esta pregunta, les expongo frases de casos reales que dejan en evidencia la agresión a la que infortunadamente en su cotidianidad se enfrentan muchas mujeres que trabajan en construcción.

Para contribuir a la construcción de equidad en el gremio hay muchas formas, entre ellas está el frenar cualquier tipo de mal comentario o acción denigrante. También puede reportarlos ante su superior para que actúen ante dichas situaciones y que este sea un tema que esté en el radar de la compañía.

Si por el contrario, usted es de los que minimiza el trabajo de sus compañeras mujeres o lanza comentarios que no debería, es importante que sepa que dichos actos son constituidos como violencia de género y es un delito.

¡Cambiemos el chip y construyamos juntos un sector con equidad!