En la fabricación de metales para industrias de alta precisión como la defensa y aeroespacial, elegir entre la flexión inferior y la flexión en aire es crucial. Aunque la flexión inferior ha sido la técnica tradicional, la flexión en aire emerge como una alternativa prometedora, pese a sus desafíos en mantener tolerancias ajustadas y consistencia en la producción.
Beneficios de la flexión inferior
Control preciso de tolerancias: la flexión inferior es preferida para piezas con geometrías complejas o tolerancias críticas. Este método permite un control superior, ya que el material se moldea contra el ángulo del dado, facilitando la gestión del retroceso elástico.
Menor dependencia del operador: al lidiar con variables del material mediante la aplicación de fuerza, la flexión inferior suele requerir tiempos de configuración más cortos y resulta en mayor eficiencia en producciones limitadas.
Desventajas de la flexión inferior
Costos iniciales y marcaje del material: esta técnica puede conllevar a costos iniciales más altos debido a la necesidad de dados especializados. Además, el contacto directo con el dado puede causar marcas en las superficies tratadas.
Ventajas de la flexión en aire
Flexibilidad y eficiencia: la flexión en aire es ideal para trabajos con variaciones en los ángulos de doblado o para series cortas de producción, ofreciendo una configuración rápida y cambios de herramientas más ágiles.
Desafíos de la flexión en aire
Consistencia en las tolerancias: mantener tolerancias ajustadas es más complicado en la flexión en aire debido a las variaciones en el espesor del material y otras propiedades.
El factor decisivo: el material
Influencia de las propiedades del material: las diferencias en espesor, resistencia, y dirección de la veta del material pueden afectar significativamente la precisión del doblado en ambos métodos.
La decisión entre flexión inferior y flexión en aire depende de factores como la complejidad de las piezas, las tolerancias requeridas, y el volumen de producción. La flexión inferior es óptima para alta precisión, mientras que la flexión en aire es más adecuada para producciones variadas y cortas.
Importancia de la formación: para ambos métodos, la formación adecuada de ingenieros y operadores es esencial para garantizar la calidad y eficiencia en la fabricación de metales.