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La mayoría de las empresas están evaluando sus vulnerabilidades y buscando la manera de adaptarse y sobreponerse, asegurando con esto la continuidad de su negocio. Por esta razón, en Schneider Electric entienden la importancia de la disponibilidad de energía y la confiabilidad de un sistema de distribución, desde el diseño hasta las operaciones y para lograrlo plantean cinco enfoques:
Uso de arquitecturas prediseñadas y validadas:
El diseño deberá incluir el sistema de energía central, así como la capa de inteligencia digital conectada que se usa para la administración de energía. Equipos inteligentes: si ocurre una falla en cualquier punto de un circuito eléctrico, no querrá que esa falla afecte la disponibilidad de energía para toda la instalación, para esto se emplea la coordinación selectiva que aísla rápidamente la sección problemática, sin privar de energía al resto de la red.
Sistema de gestión de energía:
Un sistema eléctrico completamente digitalizado puede resistir mejor las perturbaciones eléctricas y es resistente al tiempo de inactividad. Esto se logra aprovechando los datos de los dispositivos conectados, actuando como un microscopio en su sistema eléctrico, monitoreando continuamente su desempeño y los activos conectados a él.
Equipos inteligentes:
El diseño de distribución eléctrica le permite optimizar el diseño de su instalación, seleccionando tamaños y combinaciones de elementos de protección eléctrica que proporcionan una coordinación selectiva ‘total’ entre todas las etapas de la red de distribución eléctrica.
Servicios expertos para mantenimiento predictivo:
Si su organización tiene recursos técnicos o experiencia limitados en el sitio, estos ‘servicios digitales’ pueden ayudarlo a reducir la complejidad y el tiempo necesarios para administrar sus sistemas de distribución de energía, mientras mejora la calidad, confiabilidad y disponibilidad de la energía.
Localización de fallas y recuperación de energía:
A pesar de las recomendaciones anteriores, siempre existe la posibilidad de que se produzca una falla, ante la cual se debe minimizar su duración e impacto. Tener los productos y el software adecuados ayudará a garantizar una recuperación rápida.
