Por: Daniela Bonilla
Las juntas cementicias se utilizan para sellar los espacios de dilatación entre dos piezas, ya sea de porcelanato, cerámica o azulejos. “El propósito de estas, es permitir que las piezas tengan una correcta dilatación o contracción, ya que al estar expuestas al calor o al frio tienden a moverse; por lo tanto, su función es permitir y absorber este movimiento sin que las piezas se levanten o se quiebren. Adicionalmente, favorecen el reemplazo de una de ellas en caso de requerirlo y previene la aparición de hongos en las juntas”, explica Bryan Flores, Arquitecto y supervisor de obra.
¿Cómo escoger el tipo de emboquilladura correcta?
La boquilla es un material que se aplica entre las juntas de elementos cerámicos o de porcelana. David Rivera, Ingeniero civil, aconseja cómo escoger la emboquilladura correcta:
- Tener en cuenta el color para que sea acorde con la estética del acabado.
- Buscar marcas confiables que estén certificadas con la NTC de adhesivos y juntas, que brinden las mejores garantías del material en cuanto a calidad, durabilidad, ficha técnica y presentación.
Sin arena
Es una buena opción cuando la separación o junta entre piezas tenga una longitud de 1mm hasta un máximo de 3mm.
Con arena
Puede utilizarse cuando la separación o junta entre piezas supere la longitud de 3mm y hasta un máximo de 20mm.
Tip: A mayor abertura, la boquilla debe tener mayor cuerpo, es decir, debe contener arena para más resistencia.
Preparación:
- Alistar agua en un balde.
- Disponer de un balde limpio.
- Adicionar primero el agua en el balde y posteriormente mezclar con la boquilla en las proporciones señaladas por el fabricante del producto.
- Mezclar de manera mecánica sin incorporar ningún otro elemento.
- Quitar el remanente de los bordes hasta lograr una consistencia homogénea y sin grumos.
- Dejar reposar 10 minutos y revolver de nuevo.
- Después de esto, el producto estará listo para ser aplicado.
Importante: Una vez esté preparada la mezcla, no agregar más agua.
Paso a paso para su uso
Aplicación
- Utilizar el raspador de juntas para quitar y limpiar las asperezas y los excesos de pegante entre las piezas instaladas.
- Esparcir la mezcla entre los espacios en sentido diagonal a la junta, con la ayuda de una llana de goma.
- Quitar los excesos de boquilla con la misma llana de goma.
- Esperar por 30 minutos y limpiar con una espuma humedecida con agua el exceso de mixtura que puede quedar sobre las piezas instaladas.
Siempre siga las instrucciones de la ficha técnica de cada fabricante.
Consejos
- Mantener las juntas limpias y libres de adhesivos, para que la boquilla tenga una buena penetración y cumpla adecuadamente con su función. Si no lo está, se puede limpiar con la espátula con mucho cuidado para no desportillar las piezas.
- Para mezclar la boquilla con el agua, se puede usar un taladro, este facilitará que la mixtura sea homogénea.
- No agregar a la mezcla más agua de la indicada por el fabricante, esto puede causar que la boquilla cambie de color en diferentes zonas y que presente porosidad.
- Es recomendable revolver cada 15 minutos, pero sin agregar ninguna sustancia.
- Después de 24 horas de haber instalado la boquilla, se puede aplicar un sellador para estas, con el fin de protegerlas de las manchas.
¡A La Obra Maestras y Maestros! A aplicar las juntas cementicias como todos unos expertos.