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Roberto Cardona Velásquez, de maestro a técnico

Hay personas que crecen con actitud luchadora y hay otras que la vida misma las va formando y forjando a insistir y persistir por lo anhelado, esta es la historia de Roberto Cardona Velásquez, un manizaleño Técnico en Sistema Liviano.

Por: Tatiana Bahamón Méndez 

El crecer rodeado de riqueza cultural, exuberantes paisajes y una grandiosa familia, es una gran preeminencia en la vida de un ser humano. Este es el caso de Roberto Cardona Velásquez, oriundo de la capital del territorio caldense -Manizales-, quien recuerda haber vivido en aquel lugar grandes momentos de su infancia al lado de su madre, sus hermanos y sus abuelos.

Formarse en una familia amorosa y tradicional, ha significado mucho en la vida de Roberto, pues su madre Luz Estela Velásquez, a quien él reconoce como su mejor amiga, una mujer luchadora y perseverante; y sus hermanos Jorge Alejandro y Angelica María, han sido ese motor que lo impulsa y que por más que pase el tiempo no se avería ni se deteriora. Roberto es el mayor entre sus hermanos y al traer a colación la reminiscencia de su infancia, comenta que aunque Carlos Arturo -su padre- quien en vida se mantuvo ausente, siempre permaneció unido junto a su familia sin importar las dificultades que consigo llevaba el día a día.

Un trabajo de herencia

Roberto, a los 9 años aunque no tenía gran conocimiento de lo que implicaba trabajar, le empezó a ayudar en el taller a su abuelo quien era ebanista por herencia. Trabajar en la mañana y estudiar en la tarde, así trascurrían sus días, los cuales recuerda con añoranza.

Al cabo de unos años de realizar labores como lijar y ensamblar, llegó su primer trabajo al taller, debía refaccionar un armario antiguo reemplazando piezas nuevas en talla de madera “recuerdo que fue en ese trabajo que realicé cuando tenía 12 años, en el que mi abuelo al cual llamaba papá, me dijo que cobrara lo que estimara correcto y desde ahí entendí que la disciplina y constancia son los valores agregados del trabajo” añade Roberto.

Así fue como en la medida que iba creciendo, empezó a realizar diferentes trabajos y su clientela fue llegando, ya no eran sólo trabajos de ebanistería y carpintería, la necesidad de aprender sobre el arte de la obra blanca, acabados y sistema liviano llegó, y según Roberto en cada proyecto el complemento del sistema liviano y la madera, llevaban sus diseños y acabados a otro nivel, desarrollando estrategias de marketing más interesantes, convirtiendo así el trabajo en su pasión.

A sus 17 años prestó servicio militar en la Octava Brigada de Armenia en donde también puso en práctica lo aprendido, pues, hizo desde arreglos pequeños hasta pintar y darle un aire fresco en acabados al batallón, lo cual fue un as bajo la manga para obtener permisos. Al salir de ahí, continuó trabajando en el taller hasta sus 25 años, en compañía de Jorge Omar, su tío quien es ebanista del cual aprendió sobre la labor de la carpintería.

Un padre de retos

A los 25 años, según narra Roberto, llegó su gran alegría y desafío a la vez, nace su hijo Juan David Cardona Vargas, quien le ha permitido vivir una gran experiencia, el ser papá.

“Después del nacimiento de Juan David, decidí salir a trabajar en fábricas, almacenes y trabajé hasta de guarda de seguridad, todo con el fin de brindarle a mi hijo una calidad de vida digna” cuenta Roberto”.

En búsqueda de oportunidades

En medio de esos ires y venires, Roberto viaja a la ciudad de la eterna primavera -Medellín-, en busca de nuevas oportunidades y aunque trabajaba en oficios ajenos a procesos constructivos, siempre surgían labores extras de carpintería, acabados, enchape, impermeabilización, entre otros.

Por motivos circunstanciales, un cliente de la ciudad de Medellín lo invitó al llano a realizar un proyecto de remodelación y fue esa la puerta a nuevos clientes, consiguiendo llegar a la ciudad de Bogotá en el año 2012 proyectando nuevos trabajos. Remodeló diversos locales del Centro Comercial Subazar en compañía de un equipo de trabajo y su función era ser Auxiliar de Mantenimiento en el día y al caer la noche trabajaba de manera independiente “trabajar de manera independiente hacía que estuviera ocupado las 24 horas del día y gracias a ello fui formando un grupo de clientes los cuales me buscaban por el cumplimiento, eficacia y calidad en los trabajos para los cuales me contrataban” añade Roberto.

El abuelo a Roberto le enseñó muchas cosas y entre ellas, a hacer bien las cosas “el perfeccionismo y ser minucioso hasta en el mismo detalle te convierte en maestro” le decía su abuelo, y gracias a ello fue como día a día eran más trabajos los que le surgían, por lo cual un día al ver que todo marchaba bien, decidió alquilar un taller de carpintería madera y carpintería metálica, realizando proyectos de mobiliario con colegios, parroquias, conventos, al cual nombró por su pasión y admiración a los caballos ‘Pegaso’, primero entre los dioses significando fuerza y libertad, ‘Karpintería & Estructuras Pegaso’ y a su vez laboraba como jefe de mantenimiento locativo en empresas.

La capacitación, una buena inversión

Esa pasión que Roberto había encontrado tiempo atrás en el Sistema Liviano en Seco, cada vez era más explícita, realizó trabajos de remodelaciones, adecuaciones, ampliaciones “cada vez me apasionaba muchísimo más ese mundo de la construcción liviana y decidí inscribirme al SENA a un Técnico en Sistema Liviano en Seco en el Centro de Tecnologías para la Construcción y la Madera en Cazucá (Soacha)-CTCM, de donde soy egresado con gratitud y orgullo personal” añade Roberto.

Robert, como es llamado con aprecio por sus allegados, quien se considera como el hombre tutoriales, a medida que realiza algún procedimiento nuevo para él, se guía con tutoriales de YouTube, asegurando que es una gran herramienta de investigación y proveedora de información, pues, el mensaje para él es claro y conciso. La capacitación es primordial en cualquier profesión y Roberto eso lo tiene claro, pues se ha capacitado en sistema liviano en seco, instalación de pisos en guadua, interpretación de planos arquitectónicos y estructurales, concreto reforzado, electricidad, mampostería estructural, sistema de calidad de concreto en obra y actualmente está estudiando diseño mobiliario en el SENA.

‘Karpintería & Estructuras Pegaso’, el taller de carpintería que abrió sus puertas hace 6 años, ha sido una gran oportunidad para Roberto mostrar el potencial que ha desarrollado empíricamente pero que también gracias a la capacitación ha mejorado y perfeccionado.

Su buen desempeño y el manejo de la calidad en la ejecución de proyectos lo han llevado a realizar trabajos hasta el Amazonas, donde hizo una cubierta para el Ministerio de Salud.

Un profesional al laborar

En su caminar como independiente y gracias a su desempeño en el transcurso del Técnico de Sistema Liviano en Seco, por medio de Gilbert Preciado Rojas, quien fue su instructor, realizó trabajos de corte e instalación de muestras de productos Eternit para la feria de construcción en Medellín 2018, y al cabo de un tiempo, participó en Expoconstrucción y Expodiseño 2019, en el stand de Eternit, donde realizó el acompañamiento técnico en el lanzamiento de tratamiento de juntas en placas de fibrocemento con masillas Eterboard.

Roberto comenta que después de tener esa experiencia en la feria, le brindaron la oportunidad de trabajar como proveedor con Eternit Colombia S.A en labores de acompañamiento técnico en sistema liviano, en charlas teórico prácticas y mostrario, lo que fue el camino que, con el pasar del tiempo lo llevaría a vincularse como Técnico en Sistema Liviano y formar parte de la familia Eternit, brindando capacitaciones técnicas a residentes de obra, residentes de interventoría, instaladores, fuerza de venta de clientes, integrando el equipo técnico de sistema liviano, del cual se siente orgulloso con el honor de aprender al lado de un gran talento humano, conformado por grandes profesionales.

Desde su vinculación ha realizado supervisiones de obras para entidades como la Policía Nacional y ha brindado capacitaciones de la mano de profesionales para aquellas personas que quieren perfeccionar su técnica en Sistema Liviano y que además de ello, quieren estar actualizados con lo que ofrece el mercado.

Roberto Aconseja

Roberto comenta que antes de ser técnico y de recibir capacitaciones por parte de expertos, en el aprendizaje adquirido y desarrollado empíricamente, se dio cuenta que a la hora de realizar proyectos en sistema liviano cometían algunos errores que con el pasar del tiempo el deterioro no se hacia esperar. A continuación algunos consejos para que los lleve a la práctica:

Desarrollar proyectos con la supervisión de un Ingeniero calculista, no pretender construir bases para cubiertas, muros de carga, sin la interventoría de un experto. ROBERTO ACONSEJA
Seguir la Norma Técnica Colombiana.
Si no sabe hacer algo o tiene dudas, asesórese con ayuda de un experto.
Madrugar dignifica y hace rendir el tiempo.
Para lograr buenos acabados, usar productos de buena calidad.
Ser honestos con los contratos en la parte estructural.
Asesórense para utilizar el calibre de perfil adecuado en un proyecto.
Aprópiense de los proyectos.

Visión emprendedora

Roberto a quien le gusta estar actualizado y capacitado con lo que depara el mercado, actualmente en ‘Karpintería & Estructuras Pegaso’ realiza diseño mobiliario a varias empresas e instituciones y asegura que aunque tiene otra fuente de trabajo, el taller es una pasión que siempre lo acompañará. Además comenta que su visión es terminar de estudiar diseño mobiliario, estudiar Arquitectura, crear una empresa enfocada en realizar trabajos en Sistema Liviano en Seco y seguir contando sus historias.

“El sistema liviano para mí ha sido un mundo mágico donde aparte de facilitar mi trabajo, puedo lograr hacer grandes proyectos sin generar desperdicio”.

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